lunes, 13 de julio de 2015

Hoy no quiero hablar del "Chapo"


Otros temas vienen a mi mente.Como el caso del problema magisterial que ya ha tomado una dimensión importante. Escuchamos versiones a favor y en contra, el caso es que hay muchos niños que no han tomado clases y cuya formación se encuentra en riesgo. ¿Cómo va a influir en su vida esta situación? No lo sabemos, probablemente hay varios “Chapos” gestándose, debemos recordar que éste ahora legendario personaje, no tuvo una infancia fácil y .. ¡Chispas!, dije que no iba a hablar del “Chapo”. Entonces a otra cosa.

Hablemos entonces de la situación económica del país. La desigualdad en las clases sociales y la concentración de la riqueza en unas cuantas manos tiene dividida a la sociedad en “los que tienen” y  “los que no tienen”. La clase media no cuenta, a veces tenemos y a veces no. El problema es cuando ésta se convierte en “ los que no tienen” (toco madera). ¡Cómo hace falta un Robin Hood! En algunas poblaciones, la pobreza extrema permite la entrada de caudillos quienes proveen a la población de beneficios, con recursos de dudosa proveniencia pero al fin útiles para esas comunidades. Aparecen figuras como la del “Chapo” que se hacen merecedores de corridos vitoreando su astucia y su “generosidad”, también…. ¡Esperen!, dije que no quería hablar del “Chapo”.

Bueno, vamos a los problemas que vive la ciudadanía del DF con el STC Metro. Problemas generados por administraciones si no corruptas, porque no me consta, sí ineficientes por los resultados de sus gestiones. Los usuarios se han visto sumamente afectados desde hace ya varios meses. Ahora se pretende la creación de nuevas líneas con la consecuente generación de obstrucciones viales y el impacto que tienen en la vialidad. La ingeniería no ha conseguido un método para impactar de menor manera la vida normal de la ciudadanía. Deberían ver la técnica desarrollada bajo la dirección del “Chapo”, no solo para escaparse del penal recientemente sino en los múltiples túneles para el trasiego de drogas entre México y los estados Unidos. ¡Epa! Otra vez estoy hablando del “Chapo”.

Esto no es posible. Parece que la figura de este Capo trasciende diferentes ámbitos, no hay manera de evitarlo. Está inmerso desde lo banal hasta las más altas decisiones del gobierno, que por cierto, todavía no se ha recuperado del fregadazo recibido. No es que se haga apología de la delincuencia, no es que estemos de acuerdo con las actividades que la delincuencia organizada lleva a cabo. El ridículo en que se cae, con la fuga del delincuente más buscado en nuestro país y otros, afecta a nuestro país de muchas maneras. La falta de inteligencia en los procedimientos de seguridad es evidente y junto con todas las deficientes acciones del gobierno hacen que la población se una en una ridiculización y burla sistemáticas a manera de desquite. ¿O qué opinan?